Existen varios tipos de montacargas. Para bodegas y tiendas
en interiores, el montacargas preferido es un modelo eléctrico o a propano,
éstos no expelen el potencialmente mortal dióxido de carbono.
Para áreas bien
ventiladas y patios exteriores, se usa generalmente un montacargas impulsado
por diesel o gasolina.
Antes de operarlo, el operador debe inspeccionar el
montacargas buscando daños obvios; busca llantas bajas, un cinturón de
seguridad dañado o faltante, perillas de control dañadas o faltantes, espejos
quebrados o dañados, fugas de fluidos y cualquier obstrucción en el mecanismo
de levantamiento. También, el operador debe abrir el compartimiento del motor y
revisar que hayan niveles apropiados de fluidos y revisar el calibrador de
combustible, asegurándose de que haya al menos un cuarto del tanque de
combustible. Si encuentras algún defecto, éste debe ser notado y un mecánico
debe inspeccionarlo antes de operarlo.
Todos los montacargas tienen un interruptor de ignición, un
freno de mano, un volante, un calibrador de combustible o de carga, una palanca
de cambios con velocidades hacia adelante, reversa y neutro; un cinturón de
seguridad, un pedal acelerador y perillas de control para levantar, bajar e
inclinar la horquilla de elevación. También puede haber una perilla de control
para mover la horquilla de elevación hacia la derecha o la izquierda.
Adicionalmente, puede tener faros delanteros, luces de reversa, un espejo, una
alarma de retroceso y otros dispositivos de seguridad. Muchos modelos requieren
que el freno de mano esté activado, la palanca sea colocada en posición
neutral, el cinturón sea sujetado y el asiento esté presionado para arrancar.
Algunos modelos detendrán el motor automáticamente si el cinturón de seguridad
es desabrochado y/o el operador se sale del asiento.
Estas medidas de seguridad
aseguran que el vehículo no se mueva sin atención.
Una vez que has leído el manual y completado la inspección
preoperatoria es tiempo de montar tu montacargas. Usa los tres puntos de
contacto al subirte y bajarte de tu montacargas para prevenir caídas. Ajusta el
asiento para que esté a una distancia cómoda del volante. Asegúrate de
abrocharte tu cinturón de seguridad. Ahora asegúrate de que el freno de mano
esté completamente activado, que tu pie esté en el pedal de freno y que la
palanca de cambios esté en neutro. Ahora puedes encender el motor. Una vez que
tu montacargas arranque escucha el motor. ¿Suena suavemente como si funciona
normalmente? Si es así, continúa. Hazte el hábito de siempre revisar el
calibrador de carga o de combustible cada vez que arranques el motor. Ahora
revisa la palanca que sube y baja las horquillas. Súbelas suave y lentamente y
bájalas a aproximadamente un pie (30 cm) del suelo. Esta es la altura a la que
deben estar al conducir. Prueba la perilla de control de inclinación. Asegúrate
de que todos los movimientos sean suaves, si no podrías tener problemas
hidráulicos. Ahora revisa la bocina. Con tu pie todavía sobre el pedal de
freno, suelta el freno de mano, empuja la palanca de cambios hacia adelante y
deja que el montacargas se mueva hacia adelante. Detente. Coloca el interruptor
en reversa, gira en tu asiento y lentamente retrocede unos pocos metros. Si
todo está bien, estás listo para comenzar la operación de tu montacargas.
La conducción inicial debe realizarse en un área abierta
como un estacionamiento o una bodega vacía. El conductor debe manejar
lentamente, con cuidado de no ir más rápido que una caminata a paso rápido. Al
retroceder, el conductor debe girar en su asiento y retroceder lentamente. Es
recomendable que la bocina del montacargas sea tocada al retroceder si no hay
una alarma automática en el montacargas. Las horquillas de elevación deben
estar aproximadamente a un pie (30 cm) del suelo a conducir. Las horquillas
deben mantenerse abajo para que, si alguien es golpeado con las horquillas, la
lesión cause como máximo una pierna rota y no un golpe a la columna o la
cabeza. Ten cuidado y mantente alerta de todo tu alrededor. La práctica
mejorará tu conducción. La parte trasera del montacargas es muy pesada para que
pueda girar rápidamente por la forma en que los montacargas son construidos. El
peso del montacargas puede causar mucho daño al personal, los materiales e
instalaciones. El cuidado al conducir es esencial. No debes bromear, y no deben
ser toleradas personas en los lados del montacargas o en las horquillas. Maneja
lentamente. Gira y mira hacia atrás al retroceder. Conoce el montacargas para
que puedas juzgar las distancias. Cuando lleves cargas muy altas para ver por
sobre ellas, muévete de retroceso para que puedas ver por dónde vas. Con cargas
pesadas, sube de retroceso las rampas, esto te dará más control. Usa tu
cinturón de seguridad. Si te caes de una cubierta o rampa y no estás usando el
cinturón de seguridad, puede ser fatal. Ten cuidado y tómate tu tiempo. La
práctica, paciencia y seguir las reglas de seguridad te convertirán en un buen
operador de montacargas.
La mayoría de cargas serán movidas en tarimas plásticas o de
madera. Las horquillas de elevación son ajustables. Practica levantar y mover
tarimas vacías primero. Si tienes que mover objetos en bastidores o en lugares
apretados, es útil tener una regla de dos hombres que te ayuden a ver más allá
de los mástiles del montacargas. Practica conducir en espacios cerrados con una
tarima vacía. Ten cuidado cuando coloques los objetos y aprende a juzgar las
distancias. Colocar los objetos muy cerca puede causar daños durante la
colocación. Ten en cuenta las limitaciones de peso de tu montacargas.
No
levantes objetos que excedan los límites de peso en el manual de operación. Si
manejas en muelles, cuida de tus distancias de retroceso para que no te salgas
del muelle. Nunca manejes hacia un vehículo desde un muelle de carga, a menos
que el camión esté acuñado, tenga el freno puesto y hayan placas que abarquen
entre el muelle y el camión. Cuando dudes maneja despacio o detente y haz lo
que sea más seguro.
Cuando levantes o bajes cargas con las horquillas
elevadoras, el montacargas debe ser acercado al camión, bastidor o pila y luego
levantar las horquillas. El montacargas no debe moverse grandes distancias o
girar con una carga levantada. El movimiento con cargas elevadas puede causar
que el montacargas se vuelque causando lesiones o la muerte. Esto también puede
dañar el montacargas, los materiales y las instalaciones. La meta es el
movimiento seguro de los materiales sin daños o lesiones.
Cuando la operación termine, el montacargas debe ser
estacionado en una superficie plana y dura. Las horquillas deben ser bajadas al
nivel del suelo y colocadas sobre el piso. Esto evita que alguien se tropiece y
las lesiones causadas por el frente de las horquillas. El freno de parqueo
siempre debe estar activado con el motor apagado y la llave fuera del
interruptor. Los tres puntos de contacto deben ser usados al bajarte del
montacargas.